Visibilizar los ingresos

A pesar de la alegría por el triunfo de Nadal, me fastidia haber estado escuchando durante este fin de semana las sandeces que a veces largan nuestros políticos cuando les ponen una «alcachofa» ante la boca. Los unos se dedican a exigir a los otros que reconozcan que estamos en crisis, como si ésa fuera la esencia de la solución a nuestros problemas económicos. Entre esos unos los hay que son abucheados cuando defienden a los candidatos «digitales» para presidir un comité directivo regional. En esta autonomía los otros dicen que el español goza de buena salud, aunque el gobierno local de estos otros lo reprima a juicio de muchos intelectuales, y de la gente más corrientita en lo de darle al cacumen.

Chiste Forges subida hipotecas
Chiste de Forges a propósito de los efectos de la subida de las hipotecas sobre la vida y libertades de los ciudadanos.

Los otros, los que gobiernan demostrando que saben «contar medidas» (hasta 47 en 100 días), se han dedicado este fin de semana a lanzar discursitos congresuales (que llaman reflexiones) para airear lo progresistas que son porque defienden algunas libertades de los ciudadanos. Parece que no les interesa tanto reflexionar públicamente sobre las libertades que no tenemos en un caduco entorno económico proteccionista y poco competitivo. Hoy falta dinero para pagar las compras que se hacían un par de años atrás, y estos otros saben muy bien lo que pasa, aunque no quieran llamarlo crisis ni tomar ciertas medidas. ¡Qué más da cómo lo llamen!

Menos mal que, de vez en cuando, llega alguien y te hace reír un rato. En mi caso, que ando preocupado por la desfachatez de uno de nuestros integradores en relación con los pagos, ha sido el genial Forges quien lo ha provocado. He visto una de sus viñetas en un artículo de Remo sobre «Algunos escenarios para solventar la crisis: Ejecuciones Hipotecarias» que, por cierto, me ha parecido muy sensato.

Por contra, insensata hasta lo inverosímil me parece la actuación del empresario que me mandó un mensaje el pasado viernes a través de uno de sus empleados diciendo que:

«ante todo pedirle disculpas por el retraso en el pago de sus facturas, todo ello debido a que la crisis afecta a todos los sectores y nuestros clientes también se retrasan en los pagos, por ello le enviamos la previsión de pago de las facturas cobradas y pendientes…»

Detrás venía una tabla con ocho facturas vencidas (la mayoría lo hizo el 31 de mayo), por un importe total de 68.500€. De esta cantidad reconocía que habían cobrado 28.500€. La columna de fechas mostraba que esta parte «planeaba» pagarla entre final de julio y de septiembre, y el resto en otros tres plazos hasta final de año. De las tres facturas giradas el 1 de julio no decía nada. Supongo que las dejaba ya directamente para 2009.

Agitando al deudor
Is it not the debtor breaking the law by not paying me?

Por si eso fuera poco, el 30 de junio recibí otro mensaje diciendo: «…hoy deberían de haberse empezado a realizar los pagos que tenemos pendientes con Ud., pero debido a un problema en contabilidad, se han retrasado al día de mañana…». Inocente de mí, creí que el «día de mañana» era el martes. Pero no, debía de querer decir «ad calendas graecas» (nunca). Y esto no es todo lo de este caso, no, no lo creáis.

El 28 de mayo había recibido un correo-e conteniendo la frase: «Le adjunto una hoja por cada pedido en firme, de los cuales ya puede hacer la factura, para poder contabilizarla y pagársela cuanto antes.» Este envío se refería a varios pedidos de licencias devengados entre primeros de noviembre y finales de abril. Nuestro acuerdo establece emisión de pedido al concretarse el compromiso del cliente (no seis meses después) y pago a 30 días de su firma. Otra vez me equivoqué al entender lo de «cuanto antes»; pensé que se referían a primeros del mes siguiente, cuando hacen sus otros pagos.

Lo anterior es sólo el episodio más reciente de una recurrente historia de «tensiones de tesorería» vividas con este «partner«. El pasado lunes les informé de que íbamos a materializar nuestros reiterados anuncios previos sobre lo que haríamos en el caso de que persistieran en sus prácticas. No trabajaremos más con ellos mientras no cambien (si es que pueden). Lo primero es evitar seguir acumulando riesgo financiero con este integrador de nuestro canal comercial. Bueno, pues tras ver que el referido «mensaje trampa» del 30 de junio no iba a detener nuestras acciones, iniciadas ese día, nos llamaron para quejarse sobre cómo éramos de malos, inflexibles e insensibles ante la crisis. También llegaron a decir que nos iba a ir mucho peor en nuestro negocio si no aceptábamos lo que nos «proponían», aunque seguidamente tuvieron a bien aclarar que no nos estaban amenzando ni nada por el estilo. ¡Qué susto pasamos!

Cabeza desfile Orgullo Gay Madrid 080705
Vista de la cabeza del desfile del Orgullo Gay del 5/7/08 en las calles de Madrid, con Bibiana Aído y Gaspar Llamazares.

¡Ah!, no os lo perdáis, uno de los socios del grupo empresarial en cuestión es una entidad financiera. Puede que a IC le interese esta historia dado su recordatorio en «Cosas que no te enseñarán en un Master» sobre que hay que vigilar la liquidez.

Ahora tenemos que empezar a buscar el dinero para pagar el IVA de esas ocho facturas. También debemos pensar en cómo reemplazar, sin daños colaterales, la presencia de este proveedor de los clientes de nuestra aplicación crítica de negocio (gestión y visibilidad de operaciones productivas de bienes y servicios). Lo cierto es que ya tenemos otros integradores cualificados, serios y reconocidos.

Mientras tanto, en Madrid, el sábado pasado tuvimos a la ministra de igualdad bloguera en la calle manifestándose «por la visibilidad lésbica», que debe de parecerle más importante que la visibilidad del impacto de la crisis. En Ávila, donde radica el «partner» tan perjudicado por ella (por la crisis, no por la ministra), la caja de ahorros local demuestra su interés por las nuevas tecnologías apostando por la «posibilidad de consulta de soportes como CD ROM, DVD, y el acceso a Internet» en la biblioteca del Palacio los Serrano. ¡Ya nos gustaría que reenfocara su obra social hacia otro aspecto de las «nuevas tecnologías»!. Nos vendría mejor que prestara dinero a quien incumple sus compromisos de pago con una micropyme que innova para competir con los grandes desarrolladores de aplicaciones empresariales.

Bueno, pues mientras los políticos se dedican a visibilizar sus intereses, los financieros a visibilizar sus ganancias y los afectados por la subida hipotecaria a visibilizar su solidaridad, los emprendedores tendremos que esforzarnos por visibilizar los ingresos para poder seguir trabajando.

Pues, ¡a por ellos, que podemos! La siguiente innovación tendremos que hacerla «el día de mañana»… Es broma; aunque es una pena que lo primero en nuestra lista tenga que ser ahora el vigilar la liquidez y el aplicar nuestro ingenio a cobrar.

[Imagen 1: Viñeta de © Forges tomada de El Blog Salmón]
[Imagen 2: Ilustración Cobro morosos en California © GoGuys, Inc.]
[Imagen 3: Publico.es]

4 comentarios en “Visibilizar los ingresos

  1. Estoy casi seguro de que esto no sucede en otros países, pero la desfachatez con que muchas empresas en España deciden posponer el pago de sus facturas es algo asombroso. Entre nuestros clientes hay grandes y muy grandes empresas que no tienen ningun reparo en posponer el pago de sus facturas con las razones más peregrinas, desde problemas en el SAP de turno a dificultades en la integración de sus empresas o incluso, que necesitan el dinero para otros proyectos (WTF!).

    No estoy demasiado familiarizado con los procesos de cobro de facturas y las normas legales que los soportan. Pero que en «mi casa» tenga que haber tres personas llamando por teléfono o visitando clientes para recordarles que tal o cual factura vence mañana o ha vencido hace XX días, me parece algo lamentable. Que además sea la única forma de cobrar un porcentaje significativo de facturas, increíble.

  2. A nosotros, aparte de decirnos que nos van a pagar, y luego no hacerlo, lo más que nos cuentan es que los clientes de sus otros negocios tardan mucho en pagarles, ¡y se quedan tan anchos! No proponen otra cosa que «ajo y agua». Pues va a ser que no.

  3. Hay mucho caradura por el mundo empresarial sin duda. No contaré nuestras desventuras que como todas las micropymes tenemos para no aburrir pero van por ahí.
    Recuerdo una anécdota cuando trabajaba para la gran consultora (ya sabes Rafa) que le tuve que explicar a un compañero yanqui como un ERP español cubría funcionalmente toda la problemática de los impagados y el tío alucinó, no lo entendía. Decía que en EEUU nunca se podía llegar a eso, que el que no pagaba a la carcel directo. Me dijo que era como si el ERP tuviera que cubrir que el CEO robaba en la empresa. No en vano el sector financiero español es es más avanzado a nivel mundial, no me extraña con la de trapacerías que se tienen que hacer.

    Ánimo y duro José María. Que paguen

Deja un comentario